El director ejecutivo del Instituto Nacional de Estadística (INE), Humberto Arandia, afirmó que en el Censo de Población y Vivienda 2024 se invierten $us 68 millones y no $us 140 millones como acusó el expresidente Evo Morales.
Además, destacó que este proceso fue “totalmente técnico” a diferencia del realizado en 2012 y que tuvo varios vicios.
“Es importante destacar, contrariamente a lo que señalaba el señor Evo Morales hoy en la mañana, que el Censo de Población y Vivienda no costó 140 millones, tal cual se puede verificar en las leyes aprobadas en nuestro parlamento. El componente del Censo de Población y Vivienda cuesta tan solo 68 millones de dólares”, aseguró en entrevista con Bolivia Tv.
Morales, en su programa dominical, dijo que en el censo de este año se invierten $us 140 millones, superior a los $us 50 millones que durante su gobierno se destinó para organizar el Censo de Población y Vivienda de 2012, que fue muy cuestionado por la variación entre los resultados preliminares y finales, pero además porque no se hizo la actualización cartográfica y por una mala capacitación de los censistas.
“En algún momento tienen que rendir cuentas, dónde se han ido los 140 millones de dólares y con nuestra experiencia, presupuestado para 50 millones de dólares, (…) no tengo ninguna información hasta ahora de que faltó la papeleta censal, habría que ver ese tema”, acusó.
Ante la inquietud del expresidente, Arandia le recordó que el censo de este 2024 “a diferencia del 2012, sí tuvo cartografía completa y aparte de eso, una cartografía estadística totalmente digitalizada” y que permitió “maximizar la cobertura”.
“A diferencia del (censo de) 2012, se construyó una boleta participativa, una boleta censal donde fueron tomados en cuenta las nueve gobernaciones, los 343 municipios, las universidades e instituciones públicas y privadas, con experticia en la materia censal; un censo donde se hicieron pruebas cualitativas, cognitivas, pruebas piloto, censos experimentales; es decir, a diferencia del 2012 un censo totalmente técnico”, enfatizó.
El proceso censal de este año movilizó a 525.615 censistas voluntarios de los 876.000 registrados a escala nacional. Visitaron más de 5 millones de viviendas en toda Bolivia.
Se instalaron 6.612 centros de operaciones en los nueve departamentos.
A diferencia del censo de 2012 y gracias a la actualización cartográfica con cobertura total del país se consolidaron 434.064 segmentos, se entregaron 97.780 cajas, casi 6 millones de cuestionarios, 536.000 bolsas, 536.000 estuches, 100.000 lápices y otros insumos.
En el operativo censal de 2012 solo se movilizaron 272.000 censistas, en un proceso que generó una aguda polémica porque se presentaron datos preliminares y finales diferentes sobre el total de la población.
Fue el propio Morales quien, en enero de 2013, presentó los resultados preliminares del censo que indicaban que la población de Bolivia era de 10.389.903 habitantes. Incluso, dijo que Santa Cruz, con 2.776.244, era el departamento más poblado del país, relegando a La Paz que tenía 2.741.554 habitantes.
Sin embargo, meses después se presentaron dos cifras: primero de 10.027.254 habitantes y finalmente 10.059.856 habitantes. Con esos datos, La Paz volvió a ser el departamento más poblado con 2.719.344 habitantes y Santa Cruz quedó en el segundo lugar con 2.657.762.
La evidente variación en los datos llevó al entonces gobernador de Santa Cruz, Rubén Costas, a definir como un “fracaso” el censo, denunció un “escamoteo vergonzoso, despiadado y organizado contra todos los bolivianos” y anunció, como protesta, la realización de una “encuesta de población y de hábitos familiares” en Santa Cruz, reportó el diario Opinión en julio de 2013. // Fuente: ABI