En dos años y medio de gestión del Gobierno, la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (FELCN) realizó más de 25.000 operativos, se destruyó 585,41 toneladas de droga, entre marihuana y cocaína, y se aprehendió a 8.069 personas vinculadas a esta actividad.
Los datos los dio a conocer el viceministerio de Defensa Social y Sustancias Controladas, Jaime Mamani, en la suscripción de un acta de entendimiento con la Gobernación de Cochabamba.
“Bolivia es referente a nivel internacional y es reconocido por el esfuerzo que realiza en materia de lucha contra el narcotráfico. Somos la gestión más transparente de la historia de nuestro país y la gestión que ha roto récords históricos en cuanto a secuestro de sustancias controladas, aprehensiones”.
Según el viceministro, hasta la mitad de mandato del presidente Luis Arce se destruyó 148 laboratorios de cristalización y 1.931 fábricas de pasta base de cocaína, además que se secuestró 140 aeronaves y se destruyó 143 pistas clandestinas.
Mamani señaló también que el trabajo de la FELCN no termina con la aprehensión de personas vinculadas al narcotráfico o con el secuestro de droga, sino que está trabajando en el nuevo enfoque de desarticulación de organizaciones criminales afectando a su patrimonio en beneficio del Estado, con el fin de que no vuelvan a financiar esta actividad ilícita.
“El narcotráfico no solo es un problema de Bolivia, sino del mundo entero, en el que intervienen países productores, de tránsito y consumidores. Está demostrado a la largo de la historia que ningún país de manera unilateral y aislada ha podido hacer frente al narcotráfico y en ese marco desde el Gobierno central trabajamos y hacemos mayor énfasis en la coordinación regional con todos los países”, remarcó.
Datos de la FELCN, en el gobierno de Arce, reflejan que la meta más alta fue alcanzada en 2022, con 211,06 toneladas de droga destruida, entre cocaína y marihuana; en 2021 la cifra llegó a 210,46 toneladas. Hasta el 31 de mayo de esta gestión se llegó a 142 toneladas.
Informe
En febrero, la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC, por su sigla en inglés) en Bolivia, en el Informe de Validación de la Información sobre la Destrucción de Drogas Incautadas, después del trabajo de campo y gabinete realizados en 2022 concluyó que los actos de destrucción de drogas ilegales se han realizado bajo el cumplimiento de estándares legales y de transparencia, con adecuados medios de seguridad y con la presencia consolidada de la UNODC, generando una señal positiva de la coordinación existente entre esta agencia con las contrapartes nacionales.
También aclaró que la UNODC no participa en la destrucción de plantíos de marihuana ni de droga líquida o cocaína líquida halladas y destruidas en las mismas incursiones de la Policía (fábricas o laboratorios de cristalización de cocaína).
De acuerdo con el viceministro Mamani, según los informes de la UNODC de 2022, a nivel mundial, uno de cada 18 personas, de entre 15 y 64 años, habría consumido alguna droga en los 12 meses anteriores. Añadió que en Bolivia existe un mayor crecimiento demográfico juvenil, situación que es aprovechada por organizaciones criminales que buscan captar a nuevos consumidores.
“Es nuestra juventud que está en peligro, de ahí la importancia de actuar de manera pronta, coordinada e institucional en las tareas de prevención para ir en contra de este flagelo”. / La Razón