Bolivia pone fin este lunes a la emergencia sanitaria por el COVID-19.
El coronavirus llegó al país el 10 de marzo de 2020, con dos casos que se registraron en las ciudades de Oruro y Santa Cruz, las portadoras del virus habían hecho un paso previo por la sede de Gobierno.
Ya antes, el virus comenzó a hacer estragos en China, donde apareció, y avanzó rápidamente por Europa y Estados Unidos.
Desde entonces Bolivia vivió seis olas de esta enfermedad, pero las dos primeras fueron las más fuertes, en las que la tasa de mortalidad fue de 6,2%, con hospitales llenos, las salas de velorio copadas y entierros seguidos, pero sin la presencia de los dolientes.
Emergencia sanitaria
Después de las dos primeras olas, llegó la vacuna al país para frenar la crecida del virus.
Desde que el actual Gobierno se hizo cargo de las riendas del país, llegaron más de 15 millones de dosis de la vacuna.
La vacuna ayudó a bajar los contagios y, lo que es más importante, disminuyó la tasa de mortalidad hasta el 0,1%, una de las bajas de la región.
La semana pasada, la ministra de Salud, María Renée Castro, anunció que el Gobierno determinó poner fin a la emergencia sanitaria en el país este 31 de julio. La OMS ya lo hizo antes, el 5 de mayo, para todo el mundo.